El Ibex cierra una semana convulsa por el conflicto de Ucrania con un ligero repunte del 0,5% tras la recogida de beneficios de la sesión del viernes, en la que los grandes valores, sobre todo bancos y constructoras han sufrido recortes. La volatilidad sigue siendo la verdadera protagonista de los mercados que en el caso de España navegan entre la esperanza de una recuperación económica en ciernes y las dudas por el conflicto en Crimea y sus posibles consecuencias en el continente europeo.
Ucrania es un país que representa el 1,4% de la economía de la eurozona, a nivel mundial está encuadrada en lo que se llaman mercados frontera y dentro de este extremo representa apenas el 0,15% del índice MSCI frontier markets. Los problemas para que el miedo regrese a los mercados son en mi opinión dos: el primero, que Rusia haya intervenido para ocupar Crimea, un enclave militar estratégico para acceder al Meditarraneo, aprovechado la debilidad política del nuevo gobierno ucraniano. Si se toman represalias desde EEUU y la UE para apoyarle puede traer restricciones energéticas a la eurozona con los perjuicios que éllo conllevaría (hoy por ejemplo la bolsa alemana ha caído el 2%, la que más en Europa). En segundo lugar, la delicada situación financiera de Ucrania, que la puede llevar a una declaración de quiebra soberana si no recibe ayuda internacional, en particular del FMI, y eso contagiaría al resto de mercados emergentes.
Las dudas que ha generado el informe de empleo en EEUU y la situación en Ucrania, que no tiene visos de solucionarse en el corto plazo ,han provocado que los inversores cerrarán la semana retrocediendo posiciones. En el mercado de deuda, la prima de riesgo se desinfla hasta los 169 puntos, su nivel más bajo desde abril de 2011 y la rentabilidad del bono español a diez años se sitúa en el 3,36%. Y en lo que respecta al mercado de divisas, el euro repunta hasta los 1,39 dólares después de que Draghi no diera pistas sobre una posible rebaja de los tipos de interés. La semana que viene, sin grandes datos macroeconómicos habrá que estar pendientes de la evolución de los acontecimientos en Ucrania.
En definitiva, a corto plazo puede pasar de todo, pero atención, una vez más para las inversiones de largo plazo, estas situaciones son oportunidades para aprovechar de la estrategia de precios medios.